Esta película se remonta a la época de la segunda Guerra Mundial, cuando Alemania estaba en busca de todos los judíos para aniquilarlos. La historia gira alrededor de la niña Liesel y es narrada por una voz masculina que al final nos enteramos de quien se trata. Liesel es adoptada por una familia alemana junto a su hermano menor, quien no llega con vida donde su nueva familia, aquí la niña tiene que adaptarse a ellos, además de una nueva vida donde tiene que ir a la escuela sin siquiera saber leer ni escribir. Esta situación la hace esforzarse más, le toma mucho amor a los libros y termina robándolos para poder tener más que leer.
Mientras tanto, su nueva familia tiene viviendo en el sótano de la casa a un judío con cuyos padres estos estaban prácticamente en deuda. Las cosas no están muy fáciles para los judíos y quienes los ayuden, así que tienen que buscársela para poder mantenerlo sano y salvo. Entre este refugiado y Liesel se crea un tremendo lazo de amistad.
Fuera de la casa crea otro gran lazo de amistad con su vecino y compañero de colegio Rudy, quien desde su llegada forzó y forzó hasta conseguir la confianza y amistad de Liesel.
Los padres adoptivos de Liesel son interpretados excelentemente por Geoffrey Rush y Emily Watson. Mientras la película se va desarrollando y se acerca al desenlace, nos vamos encariñando con todos los personajes y el final es muy emotivo, como casi todos los dramas basados en los tiempos de Hitler y las injusticias que se vivieron.
Actualmente está en cartelera en Fine Arts en Novo Centro. Le doy 7 de 10.
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