Jessica Alba hace el papel de Sydney Wells, una chica violinista que perdió la vista en un accidente con unos «tira pó» a los 5 años. Después de todos esos años siendo ciega se hace una doble transplante de cornea y recupera la vista. Ella entonces empieza inmediatamente a ver cosas sobrenaturales y que la están aterrorizando. No está segura si son producto de algo post cirugía en lo que se acostumbra a su nuevo sentido, un producto de su imaginación o algo real. Todo el mundo empieza a creer que ella está medio loca y que está en cierto punto negada a su nuevo estado, pero ella está segura que el problema viene de la persona que anónimamente le donó las córneas y quiere investigar quién es y buscar la explicación al fenómeno.
Ok, sabido esto, y si quieren ven además el trailer, el que no la ha visto pudiera decir «wow, pero se ve interesante la peliculita esta!»… si, los entiendo, yo también pensé lo mismo. Aparte de deleitarme la vista viendo a Jessica Alba, que hasta ciega está entera, no hay más nada que ver de esa película. Cuando una película de misterio se vale únicamente de los sonidos repentinos en ciertos momentos para causar miedo a mi como que no me llega. Creo que además de todo, la primera escena de la película, la cual no les voy a contar, ya hace que uno sepa de una vez la razón por la cual Sydney está viendo cosas raras. Muy predecible, una película excelente para cuando uno no está por pensar mucho y no quiere darle a pausa cuando va para el baño porque no se va a perder de nada y no perderá el hilo de la historia. Le doy un 3 de 10.
