Paintball

Hace par de días Juan Carlos, el pana de la maestría con el que hice El Aburre, me había hablado de ir a jugar paintball un domingo, pues bien, este domingo me llamó y me dijo que me ponga la ropa más asquerosa que tenga y que cojiera para su casa para irnos a matar. El día estaba lluvioso por allá, la cosa de paintball está por la Jacobo Majluta, en un monte que está preparado ya para este juego. Un lodazal grandísimo pero como no era ajedrez que se iba a jugar le dimos para allá, se repartieron las ametralladoras, las fundas de bolitas de pintura, las máscaras, se eligieron los equipos (8 para 8), se repasaron las reglas, cada equipo cogió su lado y arrancó el juego. Ahí nada más se oian los balazos dando en los tanques y cortando brisa jejeje. El primer juego se acabó como en 10 minutos, rapidísmo, acabamos con el otro equipo, el segundo duró más pero perdimos y en este me dieron un balazo en la nalga, el tercero duró más o menos lo mismo que el segundo y ganamos de nuevo. No estoy seguro si llegué a matar a nadie porque la jodía máscara esa (como la de los swat) se empañaba y no podía ver casi nada. Por allá me encontré con Miguel Martínez que estaba también en el grupete que fue. Eso si, que quedé con lodo por todos lados y mojado como hasta las rodillas, los tenis ni se ven de lodo, ojalá que para la próxima no esté mojado para uno poder acostarse en el piso a disparar, porque los pozos son grandes en las trincheras y los escondites y uno tiene que agacharse y mojarse o quedarse parado y que lo suenen. Estaré jodiendo con esto hasta que me den un fundazo que le coja miedo. La foto que puse fue un ejemplo, pero los equipos son muy similares y el área también.